Reportaje

El oficio más peligroso

JULIO ROSPIGLIOSI
Primero los extorsionaron Los Occidentales, banda de venezolanos que debutó matándoles a un chofer como “señal de poder”. Pagaron. Después llegó otra banda, igualmente surgida de la diáspora purulenta del chavismo: Los Desa Antitrén. También pidieron lo suyo. Fue entonces que decidieron cerrar. Ahora han reabierto por necesidad.

Paradero de la empresa de Transporte Multiservicio Ovni (Etmosa) ubicado en la urbanización San Diego, en San Martín de Porres. El lunes reabrieron sus puertas, pero no todos se han animado a salir de ruta.

En la empresa de transportes Etmosa, de San Martín de Porres, se vive un verdadero infierno. Las intimidaciones y los atentados de los extorsionadores han recrudecido en las últimas tres semanas. Dos delincuentes prendieron fuego a la fachada de la vivienda de una de las accionistas a inicios de agosto y, días después, delincuentes en moto amenazaron pistola en mano a dos choferes. La semana pasada lanzaron una granada a otro conductor que estaba manejando un bus con pasajeros. 

La compañía dejó de operar el 18 de agosto y esta semana regresó a las calles. “No todos los choferes se han animado a volver a la ruta”, dice uno de los dirigentes de la empresa que nos pide mantener su identidad en reserva. Teme que lo asesinen.

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